¿Conoces el largo camino desde el grano de cacao hasta la delicia envuelta en papel de plata? Guido Kunze, de 52 años y poseedor de varios récords mundiales, ha iniciado esta ruta de unos 10.000km en bicicleta a finales de Marzo.
10.000km en bicicleta desde Colombia a España para impulsar el comercio justo
Guido Kunze, un deportista alemán de 52 años y poseedor de varios récords mundiales, inició a finales de Marzo lo que probablemente es su aventura más grande hasta la fecha. En bicicleta lleva 40kg de granos de cacao de la finca en el Sur de Colombia hasta Cartagena de Indias en la costa caribeña. Como si fuera la Vuelta a España, un equipo de televisión le acompaña en carretera y un dron le sigue en el aire. Desde Cartagena zarpa un velero de alta velocidad para cruzar el Atlántico hasta Lisboa. De vuelta en la bicicleta, Guido tiene que ser puntual para una cita de rodaje en el museo del chocolate de Sevilla. Fue en la ciudad de la Giralda donde en 1585 se registró por primera vez el nombre del cacao. El 19 de Abril, a Guido le espera el Embajador de Colombia en Madrid. A finales de Abril, después de pasar por Francia, Mónaco y Suiza, Guido Kunze llegará a su pueblo en Alemania. Entregará la materia prima a su amigo de toda la vida, el chocolatero Alexander Kühn, responsable de elaborar el "Chocolate de Aventura de Colombia". Los beneficios de su venta se destinarán a una película educativa para colegios alemanes sobre el comercio justo con Latinoamérica.
Las 11 etapas en Colombia
Guido ya ha superado las 11 etapas en Colombia atravesando el país entero desde la frontera con Ecuador hasta Cartagena de Indias. El tour empieza con un gran momento cuando tiene que cambiar las dos ruedas por cuatro por cuatro para llegar a la finca de cacao San Luis en Nilo. Aquí donde todavía no ha llegado el turismo y sin embargo la belleza del lugar y de la gente es enorme, Guido y su amigo, experto en la materia, seleccionan los primeros granos de cacao. La gran calidad de su favorito, la variedad National Criollo, les reafirma en la idea de hacer un acuerdo directo entre la finca y el punto de venta en Alemania sin pasar por intermediarios. Así el amante de chocolate que a la vez es consumidor responsable puede disfrutar de un producto artesanal de máxima calidad y el campesino en Colombia puede obtener un beneficio algo más digno del trabajo que le dedica. Después de posar con María de Campo, la representante oficial del cacao colombiano, Guido sube nuevamente a la bicicleta y se enfrenta con la rebeldía de los Andes colombianos. Siendo el primer ciclista que recorre esta distancia, Guido tiene que luchar con diferencias de altitud considerables. Mientras en competiciones profesionales de ciclismo se suelen superar hasta 40.000 metros de altitud, el alemán contabiliza 76.000 metros. "La recompensa para este reto físico está en los espectaculares paisajes que pasan por tus ojos cuando comienzas el día en un valle y lo terminas encima del nivel de las nubes", nos comenta. Guido es de los que hablan claro; Villa de Leyva le gusta menos de lo que pensaba por la exuberante plaza, desproporcionada en comparación con las pequeñas casas que la rodean. ¡En cambio, Barichara le enamora! Las bonitas casas que jalonan unas callejuelas que suben y bajan constantemente sin saber que te espera a la vuelta de la esquina; como si el pueblo quisiera retar al ciclista con su propia prueba.
Sustos en alta mar
El día 10 de Abril, Guido y su equipo llegan por fin a Cartagena de Indias en la costa caribeña de Colombia. La soledad que a veces han sentido en los últimos días en los altiplanos inhóspitos da paso a la euforia de cumplir la primera gran meta; la de haber atravesado un país de 1,142 millones de km2, el doble de España, tan solo con la propia fuerza muscular, es decir en bicicleta. La mañana siguiente a las cervezas del triunfo, la resaca no impide que los alemanes descubran las plazuelas en el famoso casco antiguo colonial de Cartagena. Marvin, el hijo de Guido que en la película va a tener el papel de narrador de la historia, quiere ponerse rastas y así padre e hijo acaban en una peluquería que podría ser la de uno de los relatos de García Márquez. El día siguiente es el gran día! Con un presentimiento raro, embarcan en un velero de alta velocidad rumbo a Lisboa. Cuando llevan un día y medio navegando por el Atlántico, de repente Guido escucha un ruido colosal y observa como la tripulación empieza a correr por todo el barco gesticulando nerviosos. La dirección asistida se ha bloqueado dañando de golpe el sistema direccional del barco. Guido y sus contendientes se encuentran en alta mar a cientos de kilómetros de la costa colombiana y ya no tienen la maniobrabilidad sobre su velero. Gracias a Dios el buen tiempo juega a su favor y al final el capitán consigue llevar el barco de vuelta al puerto de Cartagena de manera manual.
En breve ... la continuación del largo camino del chocolate Lisboa, Sevilla y Madrid donde Guido se encontró con el equipo de Vive Colombia y fue recibido por el Embajador de Colombia en España.
El especialista de viaje Vive Colombia es uno de los patrocinadores de esta gran aventura. Si vosotros queréis emprender un gran viaje, mandadnos vuestras ideas y estaremos encantados de hacerlas realidad.
Nota de prensa (Abril 2018): El Largo Camino del Chocolate
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